España se enfrenta a una nueva campaña contra incendios con 70.000 hectáreas arrasadas 

La Dirección General de Protección Civil y Emergencias del Ministerio del Interior y todas las agencias de Protección Civil y Emergencias de carácter autonómico han comenzado ya la campaña contra incendios de verano y lo han hecho con 70.000 hectáreas boscosas ya quemadas en España. Los principales responsables de esta campaña se juntarán en el II Congreso Nacional de Protección Civil y Emergencias, al acabar la temporada de incendios de verano, para abordar las principales innovaciones en esta materia. 

Según la estimación del Sistema Europeo de Incendios Forestales (EFFIS) estos datos confirman que la situación es la peor desde 2008, con el peor marzo y el peor mayo de la última década 59.500 hectáreas quemadas solo en estos dos meses.  

Esta semana, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha elevado el riesgo por altas temperaturas y posibilidad de incendios, por lo que al Dirección General de Protección Civil ha pedido extremar las precauciones para evitar riesgo de incendios forestales, cuya alerta continuará muy alto o extremo en los próximos días.  

Lucha contra incendios forestales 

La Asociación Española de Sociedades de Protección contra Incendios, Tecnifuego, ha recordado, en una nota de prensa, tres aspectos esenciales a tener en cuenta ante la destrucción provocada por los incendios forestales: “la destrucción de masa forestal, la emisión a la atmósfera de CO2 y gases contaminantes que provocan los incendios y el grave riesgo para las personas que viven en la interfaz urbano-forestal”.  

De esta manera, la sociedad española debe implicarse de manera consciente y responsable ante esta emergencia de manera individual y las Administraciones públicas, ha explicado Tecnifuego, deben “hacer frente a los incendios de la manera más eficaz posible”.  

Efectos en la sociedad 

Los incendios forestales, que cada año destruyen miles de hectáreas de bosques, destruyen cientos de casa al año, provocan miles de evacuados y emiten toneladas de CO2 al ambiente. Todo ello afecta a la ciudadanía, favorece la despoblación de la España rural y destruye la economía de las zonas arrastradas por el fuego, así como la riqueza natural del país.  

Tecnifuego, en su nota, ha exigido a las Administraciones un plan que ” debe ser muy ambicioso y ágil en la ejecución. Debe cubrir todos los aspectos de la vida: desde la gestión forestal y del paisaje, hasta la inversión en la economía local y rural, pasando por el aumento del material y de los equipos humanos para la defensa y lucha contra los incendios; y campañas de concienciación en aras de la prevención y autoprotección”.