Inés Galindo (CSIC): “Es fundamental proporcionar asesoramiento científico para apoyar las decisiones de los gestores”

Inés Galindo Jiménez, vicepresidenta adjunta de organización del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), se doctoró en Ciencias Geológicas, recibió una beca de investigación del Instituto Tecnológico y de Energías Renovables, en 2000, donde trabajó en estudios de seguimiento de la actividad volcánica, además de realizar estudios sobre hidrogeología en terrenos volcánicos, volcanología física y volcano-tectóncia.  

En el segundo Congreso Nacional de Protección Civil y Emergencias, el CSIC dará un gran número de ponencias, sobre cooperación internacional, gestión y prevención ante emergencias o maremotos, entre otros temas, y la propia Inés Galindo participará en la mesa Ciencia en las emergencias. 

¿Cómo ve este Congreso como punto de encuentro?

Es una oportunidad única para estar en contacto con cualquier interviniente en una emergencia, aprender de su experiencia y crear sinergias para mejorar nuestra actuación en emergencias. Desde el CSIC hemos participado en simulacros y colaborado en numerosas emergencias como la pandemia del COVID o la erupción de La Palma y creemos que es fundamental proporcionar asesoramiento científico para apoyar las decisiones de los gestores.

¿Cuál es su opinión sobre la Protección Civil y Emergencias en España?

Mi opinión es excelente. Todas las colaboraciones que hemos tenido con Protección Civil y Emergencias en España han sido muy fructíferas tanto a nivel nacional como local e incluso como nexo con el Mecanismo Europeo de Protección Civil. Es importante que todos desarrollemos la vocación de servicio público que empapa al personal y al voluntariado que conforma la Protección Civil.

Podría decir que hace unos años Protección Civil y Emergencias se centraba mucho en la emergencia y la prevención tenía un papel secundario. Esto ha ido cambiando en los últimos años y actualmente se empiezan a ver los resultados, pero creo que todavía queda un largo camino por recorrer en este sentido. Cuando hay una emergencia creo que sale lo mejor de cada uno de nosotros e intentamos colaborar en la medida de nuestras posibilidades y somos más voluntariosos.

¿Cómo se involucra el CSIC en la Protección Civil y Emergencias en España?

El CSIC es el mayor organismo público de investigación a nivel nacional y uno de los mayores de Europa. Contamos con la capacidad de ofrecer asesoramiento científico durante situaciones de emergencia, como se ha demostrado durante la pandemia del COVID y las erupciones volcánicas de La Palma y El Hierro. Estas intervenciones han puesto en valor el asesoramiento desde el conocimiento científico, tan necesario para abordar los retos de la sociedad actual. En el CSIC se investiga en ciencia básica y aplicada, pero ambas son importantes para conocer los procesos que pueden dar lugar a emergencias, estudiar su evolución y pronóstico y contribuir a reducir los riesgos. Es fundamental que la ciencia esté al servicio de la sociedad y, por tanto, colabore con Protección Civil y Emergencias en todo el ciclo del riesgo. Por ello, el CSIC, además de firmar convenios y colaborar en proyectos de investigación, participa en numerosos comités científicos de asesoramiento de Planes de Protección Civil y Emergencias.

Actualmente, en el marco de las acciones que el CSIC está implementando para situar su ciencia en el centro de la toma de decisiones políticas, estamos trabajando en la creación de un “Protocolo de Asesoramiento en Emergencias y Catástrofes”, una guía interna que permita dar la formación adecuada al personal científico-técnico para asesorar en caso de emergencia o catástrofe y que permita su rápida activación y su operativa.

 ¿Cuáles son los principales desafíos a los que se enfrentan las Emergencias a corto o medio plazo?

Está claro que en el contexto del calentamiento global y cambio climático hay muchos peligros que están aumentando su intensidad y frecuencia. Esto unido a la alta densidad demográfica, la sociedad del bienestar y la dependencia de las comunicaciones aumenta la vulnerabilidad de nuestra sociedad y, por tanto, el riesgo. Por ello, como comentaba anteriormente, la prevención tiene que ser una prioridad, ya que es uno de los factores clave para reducir el riesgo.

Por otro lado, es necesario mejorar las herramientas de pronóstico, pero no sin afinar el conocimiento básico e histórico de los procesos, ya que las herramientas deben basarse en datos robustos. La creación de observatorios ciudadanos puede contribuir a mejorar la información, pero debe haber siempre un filtro científico-técnico de la información, con lo que se hace crucial la colaboración de la ciencia con el personal técnico de Protección Civil y Emergencias.

Finalmente, los avances tecnológicos y el uso de drones está facilitando en gran medida la actuación en emergencias y es un campo en claro desarrollo. Pero quiero destacar que nos encontramos en un momento histórico para la humanidad en el que la inteligencia artificial está irrumpiendo en nuestras vidas y habrá que explorar las vías de aplicación en el contexto de las emergencias.